En una conversación telefónica desde Nueva York, Rodrigo Malmierca, embajador y representante permanente de la Isla en la ONU, afirmó que esta fue una respuesta contundente de la comunidad internacional, contraria a lo que pidió George W. Bush, hace apenas cinco días, en su discurso injerencista.
El diplomático refirió cómo las delegaciones de numerosos países felicitaron al canciller Felipe Pérez Roque luego de conocer los resultados de la votación, en la cual 184 países aprobaron la resolución "Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba".
El espacio presentó fragmentos de las intervenciones de representantes de organizaciones internacionales como el Grupo de los 77 y China, el Movimiento de Países no Alineados, la Comunidad del Caribe y el Mercado del Sur.
Todos ellos coincidieron en afirmar que el bloqueo mantenido por sucesivas administraciones estadounidenses contra Cuba es un programa diseñado para asfixiar al pueblo, y su carácter unilateral y extraterritorial afecta también a otras naciones que mantienen relaciones e intercambios con la mayor de Las Antillas.
La repercusión internacional de lo sucedido este 30 de octubre en Naciones Unidas, es una muestra del respeto y solidaridad que el mundo siente hacia la Isla y de cómo Estados Unidos se encuentra cada vez más solo con su política genocida y aberrante.
Abelardo Moreno, viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, presente en el programa, subrayó que en la Asamblea General el año anterior el bloqueo fue condenado con una votación récord de 183 países, y en esta también fue récord, pues fueron 184.
En la resolución presentada por Cuba se le solicita al Gobierno norteamericano el levantamiento incondicional del bloqueo, el cual ha causado pérdidas económicas directas a la Isla por más 89 mil millones de dólares en los últimos 48 años.
Moreno recordó que en 1961 el presidente Eishenhower definió al bloqueo como una guerra económica implacable, encaminada a rendir por hambre y enfermedades al pueblo de Cuba, y ahora, 47 años después, el presidente Bush lo ha reiterado así.
El vicecanciller subrayó que Estados Unidos ha ignorado con arrogancia y ceguera política las 15 resoluciones aprobadas antes por la Asamblea General de la ONU.
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