Expresó el poeta chileno Gonzalo Rojas al inaugurar los trabajos del jurado del Premio Literario Casa de las Américas 2008
Mariela Morales Suárez Estudiante de Periodismo
"Fidel puso a Cuba ante la historia y eso lo saben las estrellas", expresó el poeta chileno Gonzalo Rojas al inaugurar ayer la 49 edición del Premio Casa de las Américas, en la capital cubana.
Gonzalo Rojas, ayer, en Casa de las Américas. Al fondo, la fosforescencia del Árbol de la Vida.
Quien es considerado uno de los poetas vivos más importantes de la lengua española con sus 90 años cumplidos, dedicó su intervención —en realidad un intenso poema en prosa— a trazar un perfil de la identidad latinoamericana, defender el libro como herencia cultural irrenunciable y a exaltar la alegría de estar nuevamente en Cuba.
A la instalación del jurado del Premio, efectuada en la sala Che Guevara, concurrieron los miembros del Buró Político del Partido, Ricardo Alarcón de Quesada, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, y Abel Prieto, ministro de Cultura; y Roberto Fernández Retamar, presidente de la institución.
Rojas evocó a Lezama y Carpentier, "dos estrellas"; a Borges "primo de Macedonio (Fernández), el Grande"; a Vallejo, "el que fundó verdaderamente al Perú". Y recorrió con su verbo las más diversas estancias del continente, del Río Bravo a la Antártica, pasando por "el Brasil anchuroso, sin olvidar sus islas, sus bellísimas islas".
De Cuba, el poeta, tras declararse "fidelista como sigo siendo allendero", en alusión al entrañable Salvador Allende, mártir de La Moneda, fijó un momento: "Yo estaba en Roma aquella vez leyendo el diario esa mañana del uno del 59 del otro siglo cuando le dije al Rodrigo, primogénito mío de 15 años que iba conmigo por el mundo: ‘A ver, muchacho, de las dos noticias ¿cuál?, ¿la terrestre de Fidel entrando en La Habana o la otra con lo del razzo en la Luna?’’La de Fidel, me dijo, esa no va a pasar nunca.’ Dio en el clavo. Nunca iría a pasar".
Y otro más: "Un alegrón estar aquí. Vuelvo al 72 y estoy aquí después de tanto después. Y antes y antes, vuelvo al sesenta y tantos con Cortázar, con Matta vuelvo, con Darío en Varadero. Todo eso a los 100 años. ¿Quién no cumple 100 años? Vuelvo al martes fatídico del 73, entro en el callamiento. ¡Nos mataron sangrientamente la nieve! Arriemos la bandera ensangrentada con un inmenso viva Chile. Aquí aprendí la Tierra. Cuánto y cuánto aprendí. De las estrellas aprendí. Y claro de la grandeza, de la dignidad, del gran pacto solidario. Aquí me dieron ustedes de comer, o más bien los padres de ustedes, de comer mi hambre y mi pena en los abismos del exilio, pero siempre estuve aquí: durmiera donde durmiera".
Los veinte intelectuales latinoamericanos que forman parte del jurado se trasladaron a Cienfuegos, donde a lo largo de esta semana evaluarán los libros en concurso.
El veredicto se hará público el próximo día 31, a las 7:00 p.m., en el recinto de la institución capitalina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario