NACIONES UNIDAS, 2 de octubre.–– Desde la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el canciller venezolano, Nicolás Maduro, exigió una vez más al gobierno de Estados Unidos la extradición del terrorista internacional Luis Posada Carriles, y el cese de las operaciones militares en Iraq.
El Canciller venezolano instó a poner fin a la locura de la guerra en Iraq.
Según la televisora TeleSur, Maduro adelantó que su país solicitó colaboración al Comité Antiterrorista del Consejo de Seguridad de la ONU, para que agilice el proceso de extradición de Posada "por los crímenes cometidos en América Latina y el Caribe".
El Canciller catalogó de hipócrita la política estadounidense, ya que, al mismo tiempo que "alienta la guerra, supuestamente para combatir el terrorismo, en su propia tierra protege a uno de los más peligrosos terroristas que haya conocido el hemisferio occidental".
Además, exigió el fin de las operaciones militares en Iraq lideradas por EE.UU. y Gran Bretaña, una "locura", dijo, para la cual Washington ha invertido 610 000 millones de dólares, y que "ha dejado 600 000 iraquíes muertos, más de 3 700 jóvenes norteamericanos fallecidos, y otros 25 000 incapacitados".
El diplomático venezolano denunció el incremento de una campaña mediática contra el pueblo y el Gobierno de Irán, por lo cual manifestó la necesidad "de construir los muros de contención, los alertas, llamados y alianzas para detener la locura guerrerista de las élites que gobiernan Estados Unidos".
Maduro puso énfasis en la urgencia de refundar "profundamente" la ONU para poder avanzar en la consecución de nuevos mecanismos de diálogo y convivencia "donde todos valgamos por igual, en el marco de una cooperación mundial", agregó.
Durante su intervención, el diplomático también se unió al clamor de los países que exigen la libertad de los cinco cubanos presos en Estados Unidos desde 1998.
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